Crianza con apego: Comprender el enfoque de las 7 B de los bebés
La crianza con apego hace hincapié en el vínculo afectivo a través de siete prácticas básicas conocidas como las "B del bebé" -el vínculo afectivo en el nacimiento, la lactancia materna, llevar al bebé en brazos, acostarse cerca del bebé, creer en los llantos del bebé, mantener el equilibrio y los límites, y desconfiar de los enfoques de formación estrictos-, creando un marco de cuidado receptivo que favorece el desarrollo de un apego seguro.
¿Se ha sentido alguna vez abrumado por la presión de tomar las decisiones "correctas" para el bienestar emocional de su hijo? La crianza con apego se ha ganado la atención como un enfoque enriquecedor del vínculo afectivo entre padres e hijos, pero entender sus principios básicos -y si se ajustan a las necesidades de su familia- puede ayudarle a tomar decisiones informadas sobre su camino en la crianza.

En este artículo
¿Qué es la crianza con apego y cómo funciona?
En el mundo actual hay muchos estilos y filosofías de crianza entre los que elegir. Con tantos consejos disponibles, puede ser difícil determinar qué enfoque funcionará mejor para su familia. La crianza con apego es un estilo que probablemente hayas oído mencionar y del que quizá ya sepas algo. Existen varios conceptos erróneos sobre las prácticas de crianza con apego, cómo afectan a la formación de relaciones sólidas con los niños y su impacto en el desarrollo infantil. Siga leyendo para obtener una visión general de la crianza con apego, aprender más sobre este enfoque de cuidado y descubrir cómo muchos padres encuentran apoyo a través del asesoramiento de telesalud.
Enfoque reflexivo de la crianza o tendencia popular: ¿En qué consiste la crianza con apego?
Empecemos con una breve historia de la crianza con apego.
El término crianza con apego fue desarrollado en 1982 por el pediatra estadounidense William Sears y su esposa, la enfermera Martha Sears.
La práctica se centra en lo que denominaron las siete «B» del bebé: vínculo afectivo al nacer, lactancia materna, llevar al bebé en brazos, acostarse cerca del bebé (o compartir la cama), creer en los llantos del bebé, equilibrio y límites, y cuidado con los domadores de bebés. Estos siete principios constituyen la base del enfoque de la crianza con apego entre padres e hijos. A continuación analizaremos en detalle cada una de estas ideas. El concepto central de la crianza con apego es que los cuidadores deben ser muy receptivos a las señales del niño que indican sus necesidades. El matrimonio Sears desarrolló estas ideas basándose en su experiencia en la crianza de sus ocho hijos y en las observaciones de antropólogos sobre las prácticas de crianza en comunidades tribales.
Paralelamente, el psiquiatra inglés John Bowlby trabajó con niños con trastornos emocionales y desarrolló una teoría similar denominada teoría del apego. La psicóloga especializada en desarrollo infantil Mary Ainsworth también contribuyó significativamente a la teoría del apego. Esta teoría hace hincapié en que los niños pequeños dependen en gran medida de su cuidador principal para que les proporcione una base psicológica que dé lugar a relaciones seguras y al apego a otras personas más adelante en la vida. Las ideas de la teoría del apego y de la crianza con apego coinciden en algunos aspectos. Sin embargo, la crianza con apego es una práctica más estructurada, y algunos críticos creen que puede llevar a que los cuidadores se sientan culpables o avergonzados si no pueden proporcionar toda la gama de «B de bebé» a su hijo.
En concreto, la crianza con apego recomienda que los cuidadores permanezcan físicamente cerca de su bebé en todo momento, tocándolo y cogiéndolo en brazos constantemente, al tiempo que le proporcionan mucho amor y afecto. Los padres con apego intentan permanecer cerca, en la misma habitación o en la cama familiar, para poder oír fácilmente el llanto de su bebé y responder inmediatamente a los cambios de temperamento.
La teoría de la crianza con apego también disuade a los padres de pedir consejo a lo que ellos llaman «entrenadores de bebés» sobre cómo criar a su bebé. Los entrenadores de bebés, como los psicólogos del desarrollo, suelen aconsejar a los padres que ignoren las señales del bebé y sigan una fórmula u horario rígidos. En cambio, la crianza con apego anima a los cuidadores a confiar en sus instintos y en su capacidad de reconocer las señales del bebé para determinar qué hacer y cuándo.
Teoría del apego: Las «7 B» de la crianza con apego de Sears y Sears
La teoría de William Sears sobre la crianza con apego se basa en la idea de animar a los cuidadores a ser muy sensibles y receptivos a las necesidades biológicas de su bebé. En su opinión, existen siete prácticas que los padres deben seguir al aplicar estos principios de sensibilidad y empatía de la crianza con apego. A estas prácticas las denomina las «7 B del bebé», que se explican con más detalle a continuación.
Vinculación al nacer
Sears desaconseja el uso de analgésicos durante el proceso de parto porque cree que interfieren en el vínculo afectivo inmediatamente después del parto. En su lugar, recomienda el parto natural (parto sin fármacos). En cuanto al vínculo afectivo durante el parto, Sears afirma que hay un periodo tras el nacimiento en el que el bebé se encuentra en un «estado tranquilo y alerta», que en su opinión es el mejor momento para establecer el vínculo afectivo. La proximidad física piel con piel tras un parto sin medicación es muy importante en la crianza con apego. Se refiere al momento inmediatamente posterior al nacimiento en que se coloca al recién nacido sobre el pecho desnudo del cuidador. Sin embargo, no se limita sólo al periodo inmediatamente posterior al parto. El contacto piel con piel puede ser muy tranquilizador para los bebés en cualquier momento, y ambos progenitores pueden establecerlo para ayudar a formar el apego seguro del bebé a ambos cuidadores.
El parto natural puede adoptar muchas formas, como el parto en el agua o el parto en casa. Es importante tener en cuenta que estos tipos de parto no se recomiendan en embarazos de alto riesgo. Sin embargo, según los principios de la crianza con apego, el aspecto más importante del proceso de parto es evitar los fármacos para potenciar la conexión fundamental del «primer momento» entre los niños y sus padres.
Otras prácticas que no forman parte de la definición de crianza con apego de Sears, pero que coinciden con su filosofía, son el parto en loto, popularizado por la comunidad de comadronas. Este estilo de parto consiste en dejar al bebé unido a la placenta mediante el pinzamiento retardado del cordón umbilical hasta que se desprenda de forma natural. Otra práctica relacionada con el postparto es la «encapsulación de la placenta», que consiste en colocar la placenta en cápsulas de pastillas después del parto y consumirlas. Ambas prácticas están en consonancia con las recomendaciones de Sears sobre el parto con apego, pero no se incluyen directamente en sus 7 «B» de la crianza. Son enfoques más propios de la nueva era, y se recomienda investigar más antes de incorporarlos al plan de parto.
Llevar al bebé
Sears recomienda que el cuidador principal lleve al bebé sobre su cuerpo tantas veces y durante tantas horas como sea posible. Cree que llevar al bebé encima permite al cuidador implicar al niño en todo lo que hace, haciendo que el niño se sienta feliz de estar con su cuidador la mayor parte del día. Además, el cuidador puede responder rápidamente a las señales del bebé que indican que necesita atención.
Sears sugiere seguir llevando al niño durante los tres primeros años de vida, y afirma que el porteo también puede calmar las rabietas. Aunque los expertos coinciden en que llevar al bebé puesto puede calmar al niño, algunos pediatras no lo recomiendan pasados los nueve meses, argumentando que puede inhibir la inclinación natural del niño a ser más independiente y adquirir habilidades y experiencias con un abanico más amplio de la vida familiar. Si se anima al niño a explorar más allá de su zona de seguridad, se puede fomentar su independencia desde una edad más temprana.
Equilibrio y límites
Nadie espera que un solo cuidador sea la única persona capaz de satisfacer las necesidades de un bebé. La crianza con apego reconoce que esto sería poco realista y poco saludable. Es importante que los cuidadores cuiden de sí mismos y acepten la ayuda de los demás, incluidos amigos y familiares. Esto es especialmente importante si se tiene en cuenta que el parto puede ser físicamente intenso y que el cuidador principal también se está recuperando durante las primeras semanas después de tener un bebé. Los cuidadores deben equilibrar su vida personal y familiar, permitiendo que otros les ayuden para poder tener tiempo suficiente para cuidarse y mantener vínculos seguros con los hijos mayores. La crianza con apego puede ser más exigente que los estilos de crianza convencionales, y el objetivo es desarrollar el vínculo emocional y el apego seguro en las primeras etapas de la vida del niño, no agotar al cuidador. Sears recomienda varias formas de conciliar la vida personal y familiar dando prioridad a las tareas y delegándolas en otras personas para evitar el agotamiento, como permitir que los miembros de la familia ayuden con las tareas domésticas.
Lactancia materna
Como era de esperar, Sears aboga firmemente por la lactancia materna prolongada, afirmando que la oxitocina liberada durante el proceso crea una fuerte experiencia de vinculación entre el cuidador y el niño. Esto es especialmente cierto, dice Sears, durante los primeros diez días de vida del niño. Recomienda dar el pecho con frecuencia: entre 8 y 12 veces al día. El destete guiado por el bebé, o seguir las señales del niño para saber cuándo está preparado para dejar de mamar, también es un aspecto importante de la crianza con apego.
Compartir la cama
Sears dice que las familias deben utilizar los métodos de sueño que mejor les funcionen, pero que los cuidadores deben dormir cerca del bebé. Es partidario de compartir la cama, también llamado colecho, y lo define como la versión nocturna de llevar al bebé en brazos. Sears aconseja especialmente a los padres que trabajan que duerman juntos con su bebé, ya que el colecho compensa la ausencia que el niño siente durante el día mientras el cuidador está trabajando.
También afirma que el colecho facilita la lactancia nocturna, algo con lo que están de acuerdo muchos padres lactantes, y que además previene el síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) y la ansiedad por separación. Aunque todavía hay mucho debate sobre si el colecho previene o aumenta el riesgo de SMSL, la Academia Americana de Pediatría desaconseja compartir la cama con los bebés, pero anima a compartir habitación como alternativa más segura.
Creer en los llantos del bebé
Sears no cree en el adiestramiento del sueño ni en el método de «llorar hasta que el niño se duerma», que consiste en dejar que un niño que llora se duerma solo. Sears cree que escuchar el llanto de un bebé sin responder sólo endurece la capacidad de respuesta emocional del cuidador, reduce el vínculo afectivo y crea apegos inseguros en el niño. Sears sostiene que no existen pruebas científicas de que el adiestramiento para dormir beneficie a los niños o contribuya a un desarrollo infantil saludable. Muchos informes de expertos afirman lo traumático que puede resultar el adiestramiento para dormir, aunque hay métodos menos duros y otros expertos que afirman que no es perjudicial.
El llanto, opina Sears, es la forma que tiene el niño de expresar sus emociones. Aconseja a los padres de AP que aprendan a «leer» o «diagnosticar» los llantos de su hijo y a responder adecuadamente. Antes incluso de llegar a ese punto, Sears aconseja que los padres hagan todo lo posible por evitar el llanto, ya que una vez que se ha llegado a ese punto, las cosas ya han ido demasiado lejos.
Sears afirma que los padres con apego deben mantener el contacto físico con el niño, amamantarlo y compartir la cama tanto como sea posible, y también aprender a reconocer las señales de cuándo un bebé está a punto de llorar para que los padres puedan prevenirlo antes de que empiece. Sears sostiene que nunca se debe dejar llorar a los bebés porque puede causarles daño; sin embargo, otro pediatra estadounidense, T. Berry Brazelton, afirma que una cierta cantidad de llanto es normal y no hará daño al niño.
Cuidado con los entrenadores de bebés
Los entrenadores de bebés son lo que Sears llama expertos en desarrollo infantil que ofrecen consejos a los padres primerizos sobre la crianza de sus hijos. En su opinión, con demasiada frecuencia, estos expertos animan a los cuidadores a ir en contra de sus instintos correctos sobre cómo cuidar y responder a su bebé. En su lugar, los entrenadores de bebés aconsejaban seguir un programa o un horario establecido para el cuidado del bebé, y Sears consideraba que esto interfería en el establecimiento de vínculos afectivos y en la formación de un apego profundo.
Críticas habituales a la crianza con apego
Todo estilo de crianza es criticable, y la crianza con apego no es una excepción. He aquí algunas críticas generales a la crianza con apego:
Se basa en el miedo: Hay quien sostiene que el apego juega con las inseguridades de los padres. La mayoría de los padres afirman que no tienen problemas para establecer vínculos afectivos con sus bebés y que no necesitan que se les recuerde que deben darles cariño. No creen que responder rápidamente a los llantos de los bebés o evitarlos vaya a prevenir la privación emocional, el apego inseguro o los trastornos del apego. En realidad, muchos padres consideran que la alegría de ser padres y de estar cerca de su hijo es suficiente sin la sensación de miedo que puede infundir el enfoque de Sears.
Es contrario al adiestramiento para dormir: Hay muchos debates y consejos sobre el adiestramiento para dormir: algunos estudios sugieren que perjudica a los niños y otros indican que está perfectamente bien. Algunos expertos afirman que el método del «lloro» provoca problemas neurológicos y trastornos del apego, como el apego desorganizado o el apego inseguro. Otros psicólogos del desarrollo rebaten estos efectos.
Es antifeminista: La crianza con apego aboga esencialmente por que los cuidadores sean padres que se queden en casa, lo que no es posible para muchas personas en la sociedad actual, y no todos los padres quieren ser los cuidadores principales, quedándose en casa todo el tiempo. Muchos padres en nuestro mundo actual quieren trabajar y tener hijos.
Es antifórmula: Los críticos argumentan que, aunque la lactancia materna es ciertamente saludable tanto para el cuidador como para el bebé, algunos padres no pueden amamantar o no quieren hacerlo, y no se les debe avergonzar en ninguno de los casos ni hacerles sentir inadecuados por no tener los medios para amamantar a sus hijos.
No es imprescindible llevar al bebé: Los críticos sostienen que el verdadero apego no viene de llevar al bebé todo el día, sino de la relación positiva que se establece con él. Mientras la relación sea estrecha, el bebé no se verá perjudicado por ir en cochecito en vez de en fular.
Algunos creen que la crianza con apego es innecesaria, y otros la consideran una forma de maltrato infantil. Algunos creen que, aunque puede ser beneficiosa al principio, el efecto pronto se convierte en prepotente con beneficios mínimos. Estos críticos opinan que la crianza con apego priva a los niños de la oportunidad de explorar la vida de forma independiente, sin un cuidador constantemente en la misma habitación, vigilando por encima de sus hombros -o llevándolos sobre los suyos.
Versiones modificadas y menos estrictas de la crianza con apego
Si te atrae la crianza con apego, puede que te preocupen las críticas en su contra o la cantidad de trabajo que parece recaer sobre el cuidador principal. Sin embargo, recuerda que no tienes que practicar al pie de la letra todos los principios de la crianza con apego. Mientras fomentes un vínculo estrecho y afectuoso con tu hijo, ya vas por buen camino. Puedes dormir con él y darle el pecho sin llevarlo todo el día. O puedes llevar a tu hijo pegado a tu cuerpo durante gran parte del día, pero utilizar leche artificial. Haz lo que funcione para ti y para tu hijo.
Sobre todo, recuerde que cada niño -y cada cuidador- es diferente, así que lo que funciona para algunas familias puede no funcionar para otras. Después del parto, los cuidadores experimentan muchos cambios hormonales y sus sentimientos sobre la crianza con apego pueden evolucionar. Puede que lleves a tu bebé en brazos constantemente, pero que siga llorando. Puede que le ofrezcas el pecho, pero tu hijo no lo quiera las 8 o 12 veces al día recomendadas por la crianza con apego. Algunos padres consideran que los pañales de tela o la comunicación por eliminación son lo mejor para su hijo, pero puede que no sea tu caso.
Opta por lo que funcione para ti y para tu hijo, utilizando una disciplina suave, tanto contigo como con el bebé, cuando sigas determinados métodos de crianza.
Cómo obtener ayuda de profesionales
¿Te interesa saber más sobre cómo elegir el estilo de crianza que mejor se adapte a ti? ¿Le preocupa la crianza de su hijo y le gustaría recibir apoyo y opiniones? Si es así, puede que desee consultar con un psicólogo del desarrollo, o puede ponerse en contacto con uno de los trabajadores sociales clínicos autorizados de ReachLink para obtener más información sobre la crianza con apego, la teoría del apego y la formación de un apego seguro con su hijo. ReachLink es una plataforma en línea que te conecta con profesionales de la salud mental experimentados que pueden proporcionarte orientación y apoyo dondequiera que tengas acceso a Internet y un teléfono inteligente, tableta u ordenador.
Para llevar
Hay muchas maneras de aprender más sobre la crianza con apego y la creación de un apego seguro con tu hijo. Una de ellas es leer libros sobre crianza con apego para profundizar en el conocimiento de esta teoría y sus aplicaciones prácticas. Además de los libros sobre crianza con apego, también existen recursos que tratan la teoría del apego de forma más amplia, como el libro de Bowlby *Attachment* o *The Attachment Parenting Book*.
También puedes ponerte en contacto con Attachment Parenting International, una organización dedicada a educar y apoyar a las familias en su esfuerzo por proporcionar a sus hijos un vínculo emocional sano y una disciplina positiva. Attachment Parenting International publica consejos para padres en boletines, blogs semanales, una revista digital y un libro titulado *Attached at the Heart*, escrito por las cofundadoras de la organización Barbara Nicholson y Lysa Parker. Si te interesa saber más sobre la crianza con apego y la formación de un vínculo seguro con tu hijo, esta organización te ofrece valiosos recursos.
PREGUNTAS FRECUENTES
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¿Cómo influye la crianza con apego en el desarrollo emocional del niño?
La crianza con apego puede influir significativamente en el desarrollo emocional del niño creando una base segura para unas relaciones sanas. Cuando los padres responden sistemáticamente a las necesidades de sus hijos mediante el enfoque de las 7 B, los niños suelen desarrollar mejores habilidades de regulación emocional, una autoestima más fuerte y una mayor confianza para explorar su entorno. Las investigaciones demuestran que un apego seguro en la primera infancia suele conducir a mejores relaciones sociales y resiliencia emocional en etapas posteriores de la vida.
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¿Cuáles son los retos más comunes a los que se enfrentan los padres cuando ponen en práctica la crianza con apego?
Algunos de los retos más comunes son equilibrar la disponibilidad constante con el autocuidado, gestionar la falta de sueño por compartir la cama con el niño, hacer frente a las críticas de familiares o amigos que pueden no entender este enfoque de crianza y mantener los límites sin dejar de ser receptivos. Estos retos pueden generar estrés y ansiedad en los padres, por lo que es importante desarrollar estrategias de afrontamiento saludables y buscar apoyo cuando sea necesario.
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¿Cuándo deben los padres buscar apoyo terapéutico para los problemas relacionados con el apego?
Los padres deberían plantearse la terapia si experimentan una ansiedad persistente sobre su enfoque de la crianza, tienen dificultades para establecer vínculos afectivos, se sienten abrumados por las exigencias de la crianza con apego o notan que su hijo muestra signos de dificultades de apego. El apoyo profesional también puede ser beneficioso cuando los padres necesitan ayuda para procesar su propia historia de apego o necesitan orientación para equilibrar la crianza con apego con otras responsabilidades vitales.
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¿Cómo puede ayudar la terapia a mejorar el apego entre padres e hijos?
La terapia puede mejorar el apego entre padres e hijos mediante diversos enfoques basados en la evidencia. Un terapeuta licenciado puede ayudar a los padres a entender su estilo de apego, desarrollar estrategias de crianza que respondan y abordar cualquier barrera emocional que afecte al proceso de vinculación. Las intervenciones terapéuticas pueden incluir terapia de interacción padres-hijo, técnicas de entrenamiento emocional y estrategias para mantener unos límites sanos mientras se practican los principios de la crianza con apego.
